METALHEARTS




Otra vez los californianos Y&T han llenado la Capitol de Santiago. No completamente llena, no sold out pero sí bastante. Y ambientazo total.
Y es que Y&T se hacen querer. No dan un gran espectáculo pero son muy cercanos al público y eso se nota. Su actitud es muy cercana, no van de superestrellas y la gente enseguida se siente cómoda con ellos, que se meten al público en el bolsillo desde la primera canción. Su simpatía, su energía, y sus tablas llenan el escenario desde el primer minuto y durante todas las dos horas que dura su actuación. Y los espectadores, muchos de la misma hornada que los músicos pero muchos más jóvenes, y todos cantando los temas a la sombra de Dave quien conserva aun con el paso de los años una voz exquisita.
El calor de la sala fue aumentando con cada tema así como las ovaciones cada vez más fervientes de la gente con cada anuncio de siguiente tema y con cada primera nota.
Y todo esto a pesar de que Y&T no tuvieron ese día ni mucho menos su mejor actuación. El bajista Brad Lang se echó muchísimo de menos sobre el escenario. Y es que Brad lo llenaba todo con su derroche de simpatía y de energía, además de notarse una gran conexión entre todos los músicos. Y es que el actual bajista Aaron Leigh, si bien tan virtuoso como el anterior, no conecta con el público para nada, al contrario, es de los que se dedican a tocar mirando el bajo todo el tiempo sin apenas levantar la cabeza, balanceándose en su sitio y poco más. Y ahí se echan de menos los giros de peonza de Brad, sus saltos, sus sonrisas, sus idas y venidas... y posiblemente también lo echó de menos John Nymann, que tuvo que hacer sus propias piruetas a solas, estando acostumbrado como estaba a compartirlas codo con codo con Brad, y lo cierto es que se le veía un tanto solitario. Por su parte Mike Vanderhule tocaba la batería con una desgana y una seriedad que aburría a un muerto mirarle, aunque ahí sentado con su pequeña batería y tocando como el que está viendo llover, sacaba unos sonidos impecables y se plantó su solo de batería como el maestro que es, aunque eso sí, mucho más desmotivado que otras veces.
Dave Meniketti por su parte estuvo bien, muy en su linea, bastante calmado, simpático, comunicativo y sintiendo cada punteo de guitarra hasta el último poro de su piel, y desde luego también de la nuestra, porque su dominio de las 6 cuerdas no deja impasible a nadie y nos envuelve en un ambiente en el que solo se puede disfrutar de la música y dejarse llevar por lo que se escucha.
Os puedo decir que eso solo lo vais a sentir yendo a uno de sus conciertos, ni por asomo podéis ni acercaros a experimentar lo que se siente escuchando y viendo a estos monstruos viendo videos o grabaciones. Solo estando ahí sentiréis su increíble directo.
Tocaron ellos solos, sin teloneros. Lo han hecho así cada vez que han venido. Siempre unas dos horas en las que sonaron temas de toda su larga trayectoria musical, recordando al batería original de la banda recientemente fallecido Leonard Haze con el tema que escribió junto a Dave "Struck Down".
Llevaban un escenario simple pero bonito, un lienzo con un gran Y & T que iba siendo iluminado de distintas maneras con distintos colores y que quedaba muy vistoso.
Al finalizar el concierto salieron todos ellos a estar un rato con el público y hacerse fotos con la gente. Todos encantadores, como siempre.
Set list:
On with the show
Lipstick and Leather
Don't stop running
Dirty girl
Mean Streak
Don't bring me down
Don't be afraid of the dark
Blind patriot
I'll keep on believing
Black tiger
Midnight in Tokyo
Take you to the limit
Hang 'em high
I believe in you
Contagious
Summertime girls
Rescue me
I'm coming home
Open fire
Forever